El Frente Polisario, que destruyó el lunes minas antipersonales, exhibió parte de su fuerza blindada en Tifariti, en la zona controlada por los independentistas saharauis, aunque advirtió de que cooperará con la ONU mientras permanezca el despliegue de la Minurso, según el presidente Mohamen Abdelaziz.
El Frente Polisario, que destruyó el lunes minas antipersonales, exhibió parte de su fuerza blindada en Tifariti, en la zona controlada por los independentistas saharauis, aunque advirtió de que cooperará con la ONU mientras permanezca el despliegue de la Minurso, según el presidente Mohamen Abdelaziz.
El presidente de la República Arabe Saharaui Democrática (RASD), Mohamed Abdelaziz, señaló en rueda de prensa que «si Naciones Unidas fracasa, y es algo que no deseamos, en el cumplimiento de sus compromisos recurriríamos a otras vías en defensa de nuestro legítimo derecho de autodeterminación, incluida la lucha armada».
Atribuyó al fracaso de «estos 15 años (de presencia de la Misión de Naciones Unidas para el Sáhara Occidental) de la ONU» las movilizaciones en las ciudades bajo control marroquí, que calificó de «resistencia pacífica».
El presidente de la RASD, que en su discurso institucional subrayó la responsabilidad política y legal de España en el «sufrimiento del pueblo saharaui», manifestó sobre las relaciones con el Gobierno español que «necesitan más claridad y firmeza».
No obstante, precisó que habían sido positivas las declaraciones del ministro español de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, tras su reunión con el enviado especial de la ONU.
Abdelaziz instó al reconocimiento de la legalidad internacional por los países árabes y sostuvo que la presencia de Minurso en la ex colonia española es una prueba de que el conflicto «no es un problema interno de Marruecos».
Consideró una posición «firme y constructiva» la decisión de Estados Unidos de exceptuar los territorios en litigio de su acuerdo de libre comercio con Marruecos, lo que dijo que «deja la opción sobre la soberanía a sus habitantes».
Recordó que a petición del presidente estadounidense, George W. Bush, su Gobierno había liberado a los últimos prisioneros de guerra marroquíes, pero no ha sido liberado ningún prisionero saharaui.
También reclamó de la Unión Europea que se abstenga de firmar acuerdos pesqueros que incluyan aguas de soberanía saharaui, pues, aseguró, «siembran inestabilidad».
lucha armada. Preguntado sobre si su Gobierno se había fijado un plazo para alcanzar la solución diplomática, Abdelaziz puntualizó que «no hemos renunciado a la lucha armada» y aseguró que los miembros del Frente Polisario están listos para el combate si fuera necesario, lo que, precisó, «puede ocurrir en cualquier momento».
Según el máximo dirigente saharaui, los impedimentos para celebrar el referéndum de autodeterminación acordado en el plan de paz auspiciado por la ONU es atribuible a las «maniobras de Marruecos y pese a las concesiones e iniciativas del Polisario para lograr la paz».
Tras los actos institucionales celebrados por la mañana en Tifariti, Abdelaziz presidió el acto de voladura de minas antipersonales con el que el Frente Polisario hacía público su compromiso de renunciar a ese tipo de armas.
Condena del Parlament
El Parlament balear aprobó por unanimidad una declaración que condena «la represión que sufre el pueblo saharaui por parte del Gobierno marroquí» y pide al Ejecutivo español que tome medidas tras la prohibición de viajar a ese país a una delegación de la Cámara.
El pasado miércoles miembros del grupo interparlamentario Paz y libertad en el Sáhara fueron rechazados por orden de autoridades marroquíes como pasajeros de un vuelo entre Gran Canaria y El Aaiún, ciudad que se disponían a visitar para comprobar directamente la situación de los saharauis.Los diputados exigen «una solución justa y duradera del conflicto del Sáhara, que pase por el cumplimiento de las resoluciones de la ONU y por la celebración de un referéndum de autodeterminación».
El Fassi: «Es una provocación al pueblo marroquí»
El ministro de Estado marroquí, Abbas El Fassi, afirmó que la conmemoración del 30º aniversario de la proclamación de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) en una zona fronteriza considerada por Marruecos como zona tapón -los independentistas califican de «territorios liberados»- es una «provocación al pueblo marroquí».
«La utilización de territorios marroquíes para la celebración de la creación de la supuesta RASD, que es una celebración quimérica, constituye una provocación para el pueblo marroquí en la que Argelia asume una gran responsabilidad», dijo El Fassi.
El ministro expresó su deseo que Argelia vuelva a «entrar en razón», que se respete el alto el fuego que Marruecos y el Polisario acordaron en 1991 tras 15 años de guerra y que la zona situada frente al muro defensivo de arena que Marruecos levantó entonces se mantenga preservada «hasta que la ONU solucione definitivamente este tema».
El Fassi dijo que el acuerdo de alto el fuego alcanzado con el Polisario bajo los auspicios de la ONU preveía una zona tapón deshabitada junto al muro defensivo y que Marruecos avaló esta decisión para «preservar la buena vecindad con Argelia» y «evitar un eventual altercado».
Recalcó que, por ello, la celebración del 30º aniversario de la RASD en Tifariti constituye una «violación flagrante del derecho internacional y del acuerdo de alto el fuego».
soldado español. El Fassi, que viajó ayer a El Aaiún al frente de una delegación ministerial para inaugurar algunos proyectos de desarrollo para el Sáhara Occidental, recordó que Marruecos conmemoraba el 30º aniversario de la salida del último soldado español del territorio.
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